La verdad está en los datos. Por mucho que haya quien se empeñe en azuzar soflamas apocalípticas sobre lo mal que va el país, la realidad es bien diferente y solo hace falta mirar algunas cifras para verla. No solo acabamos de saber que nuestro mercado laboral ha alcanzado el récord de 20,8 millones de ocupados en mayo, además, mientras el valor del emprendimiento a nivel mundial descendía un 2,1% entre 2021 y 2022, en España experimentó un aumento del 8,6%, según el último informe del Impacto socio-económico de South Summit en Madrid.
Las cosas van bien, por mucho que algunos se esfuercen por hacernos creer lo contrario, y el emprendimiento español forma parte de esta ecuación positiva. De hecho, en 2022, con un 8% más de start-ups made in Spain que el año anterior, el nivel de empleo que generaron nuestras empresas emergentes fue un 14% superior al de 2021, con 160.000 puestos de trabajo, añade el informe. Lejos quedaron los años en los que “España iba por detrás” y “Madrid ni siquiera estaba en el mapa” internacional del emprendimiento, como reconoció la fundadora y CEO de South Summit, María Benjumea, cuando se arriesgó a crear este foro hace cerca de una década.
Ahora, España ostenta el cuarto lugar a nivel europeo en cuanto número de start-ups y la buena salud de nuestro ecosistema han empujado a Benjumea a expandir su misión cada vez más lejos de nuestras fronteras. Tras dos exitosas ediciones de South Summit en Brasil, la responsable ha anunciado que su próximo objetivo será la expansión internacional a Asia y Estados Unidos: “El mundo no tiene fronteras y nuestra apuesta siempre ha sido la colaboración e innovación desde un contexto global. Estamos convencidos de que no hay nada mejor que conectar regiones y llevar la innovación de España a nuevos lugares”.
Benjumea hizo este anuncio a las puertas de la XI edición de South Summit en Madrid, que este año presenta el lema “Today 2030”, en una clara apuesta por la sostenibilidad y la transición energética. “Cuidar el planeta es fundamental y tenemos muchos retos por delante para lograrlo, pero también son muchas las oportunidades que traen los objetivos de la Agenda 2030”, dijo la responsable. De hecho, entre los síntomas positivos que envuelven a la economía española, resulta que la eólica y la fotovoltaica fueron en mayo las dos principales fuentes de electricidad en España por primera vez.
Aun así, todavía queda mucho trabajo por delante para lograr una Europa libre de emisiones de aquí a 2030. Por mucho que el ecosistema emprendedor español no deje de crecer, ya sabemos que no es lo mismo innovar en nuevos modelos de negocio basados en software que construir el nuevo sistema energético, productivo y económico que el mundo necesita. La buena noticia es que, a punto de estrenar los seis meses de nuestra presidencia europea, que se alargará hasta final de año, la posición de España como anfitriona podría actuar como palanca para dirigir los esfuerzos comunitarios en innovación a temas estratégicos para la salud climática y energética del país, como el hidrógeno verde y la biotecnología.
Pero como la sostenibilidad es un concepto transversal, además de promover innovaciones directamente relacionadas con el bienestar del planeta, como las tecnologías agrícolas, alimentarias y climáticas, la XI edición de South Summit en Madrid también girará en torno a cuestiones como la dirección hacia la que deben desarrollarse tanto la sociedad y como la industria. Para lograrlo, entre todos los ponentes nacionales e internacionales que el foro reúne este año, destaca la participación del cofundador de Ethereum Vitálik Butherim, el director de Winston Eco-Strategies, Andrew Winston, y la cofundadora de The Fund VC Jenny Fielding.
“Estamos en un momento más vibrante que nunca y esto va a ir a más”, sentenció el consejero de Economía, Hacienda y Empleo de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández-Lasquetty, durante la presentación del South Summit de este año. Es cierto que los retos y los riesgos de invertir en las innovaciones estratégicas que necesita el planeta nos empujan a terrenos desconocidos, pero, como indican todas las señales positivas en las que se encuentra el país, este podría ser el mejor momento para intentarlo, por mucho que digan algunos que estamos peor que nunca. No haga caso a los agoreros ni se deje seducir por el miedo. España va bien y, si invertimos y emprendemos correctamente, podrá ir aún mejor.