El microscopio del vacío: lenguaje, IA y deseo
La IA es territorio simbólico puro. No es un cerebro que piensa sino un espacio donde todo lo que hemos digitalizado se vuelve explorable. Simulacros perfectos sin original. Puede escribir infinitas historias de amor sin haber amado, elegías sin conocer la muerte, tratados sobre Dios sin creer ni dejar de creer.